Las islas de cocina y sus composiciones
Cuando la cocina es suficientemente amplia, una isla es una magnífica solución de diseño, pero que se debe estudiar detenidamente para que cumpla las expectativas de funcionalidad y de estética requeridas.
Hay básicamente 4 posibilidades de configurar una isla:
Solo con el fregadero, solo con la placa de cocción, con ambas zonas, cocción y lavado y solo como zona de trabajo y almacenamiento.
En cualquiera de estas opciones se puede añadir una barra o mesa adosada de acuerdo al uso que se le va a dar y el diseño.
Aunque en principio es cuestión de gustos, uno de los factores que puede influir en la decisión de cómo configurar una isla, es el tipo de instalación que requiere cada una de ellas.
El montaje más complejo es el que incluye la placa y el fregadero, donde además de la instalación eléctrica y fontanería que debe hacerse a través del suelo, necesita también una campana extractora con su correspondiente salida de humos en el techo (o en la propia isla si es de superficie), anclajes apropiados y motorización adecuada.


La isla con la zona de cocción se convierte en el sitio principal de la cocina y desde donde se puede llevar el control de todo el ambiente.
0 comentarios
*Si te ha gustado, comparte o deja tu comentario.